Se han publicado una lista interminable de fotos sobre los disturbios acontecidos en Estambul y Turquía. Hemos visto la policía lanzando gas, destrozos, heridos, barricadas y un largo etc, imágenes que han dado la vuelta al mundo y que quedaran para la historia; pero si tuviera que elegir una de las imágenes más impactantes de las protestas es la de una familia de Besiktas que tiraron la televisión por la ventana como símbolo de la ausencia de información al respecto, por parte de los medios de comunicación turcos.
Supongo que la persona que lo hizo estaba harta de ver como al lado de su casa se producían graves disturbios contra la policía, mientras las televisiones controladas por el gobierno decidían emitir documentales o un reality.
Esta censura informativa no es nueva en Turquía, ni con el actual gobierno de Erdogan ni con los anteriores, de hecho es un mal endémico que hace de Turquía uno de los países con más periodistas encarcelados del mundo. Ante la falta de la información la gente se ha lanzado al twitter y a facebook para buscar información sobre los disturbios y se han encontrado con un arsenal de noticias y de fotos que dan una idea mas real de lo que pasa.
Erdogan en un discurso televisado el domingo dijo que “Esa cosa que llaman redes sociales no es más que una fuente de problemas para la sociedad” para después añadir “Hay un problema que se llama Twitter, allí se difunden mentiras absolutas”. Claramente responsabiliza a los usuarios de esta red social, de caldear el ambiente y provocar los disturbios.
Twitter es una plataforma de comunicación extraña, inútil y banal para muchas cosas, ya que en la calma parece solo servir para hacer un seguimiento al famoseo, que si el nuevo hijo de la Shakira, que si el vestido de fulanito/a… pero cuando hay manifestaciones y revueltas se vuelve un arma útil para difundir mensajes y mostrar al mundo lo que pasa.
Evidentemente twitter ha servido para difundir los disturbios, porque los medios oficiales han ignorado o han querido ignorar la noticia, de hecho en España algún periódico daba más importancia al hecho de que estas revueltas iba a suponer un punto a favor para la candidatura olímpica de Madrid, ya que casi descarta a una de sus principales rivales.
Está claro que algunas fotos que se han visto twitter no son reales o la información que la acompaña no es cierta al menos completamente, pero no olvidemos que tampoco lo son muchos partes oficiales, he conocido relatos de gente, que heridos por los disturbios, recibieron partes médicos de hospitales turcos conforme no tenían ningún problema. Con todo esto a donde quiero llegar es que no debemos olvidar que el problema real es que quien está generando ese masivo e indignante material fotográfico es la policía y no twitter. Sino hubiera represión y hubiera dialogo no habría fotos,vídeos ni nada que contar, el problema no es por lo tanto ni twitter, ni facebook ni los blogs sino el propio gobierno turco que quiere hacer como si no hubiera pasado nada y que solo habla de un pequeño exceso policial. Pero me reafirmo quien tenga dudas de cómo empezó todo, que se remita a este video donde uno puede ver como se inician los disturbios durante la primera manifestación, luego que cada cual saque sus libres conclusiones.
El gobierno turco no solo se ha negado a negociar o incluso exponer mejor su proyecto, sino que incluso ha preferido meter más leña a la hoguera, mandando mas policía, mas gas y mas represión. No solo ha llamado a los manifestantes alcohólicos, sino que el propio Erdogan se ha marchado de gira fuera de Turquía con media ciudadanía levantada en armas, demostrando que le interesa muy poco el motivo de las protestas. Su actitud es arrogante y basada en una mayoría real en el parlamento, democrática eso sí, pero basada en gran parte al crecimiento vegetativo de sus electores que tienen de media más hijos que los seguidores de la oposición; pero se olvida del hecho de quien sostiene fundamentalmente la economía del país es curiosamente el otro 50% del electorado responsable en su mayor parte del éxito reciente de Turquía, población que también debe ser escuchada y cuya opinión no puede ser ninguneada.
Un primer ministro o un presidente debería ser como un padre; recuerdo que mi padre me decía muchas veces “harás esto porque lo digo yo”, tras ello muchas veces discutíamos y muchas veces él reflexionaba y en otras ocasiones se mantenía inflexible, pero él al menos me escuchaba y sobre todo jamás usaba su superioridad física para imponerse y si algo me prohibía era en la mayoría de las ocasiones con la idea de protegerme. Erdogan podría haber finalizado esto rápidamente, pero no ha querido y ha preferido que se extiendan los disturbios por todo el país haciendo un flaco favor a la imagen y economía de Turquía, el claro ejemplo es que la bolsa de Estambul sufría ayer la mayor bajada de su historia reciente. Quien no protege y defiende a sus hijos no merece ser llamado padre.
Quizás el gobierno turco no se debe olvidar de algo que paso también en Taksim el primer día, cuando una tanqueta de la policía intento entrar en terrenos militares para maniobrar. Los soldados lo impidieron y ante su negativa a dejarles paso, la policía amenazo con entrar a la fuerza y gasearlos a ellos también, ante lo que los militares respondieron que si lo hacían, ellos también lanzarían otro tipo de cosas. Ante esta sentencia la policía reculo y se marchó. Este mensaje no es algo baladí y no hay olvidar que el ejército turco esta callado en sus cuarteles, pero como guardián estricto del kemalismo tiene un historial intervencionista muy alto y nadie quiere rememorar sucesos como los ocurridos durante el último golpe de estado militar en 1980, ya que la democracia no consiste en eso.
Pero todo depende de lo reflexivo o no que sea Erdogan, porque ya es hora que vuelva la cordura, el dialogo y la negociación ¿vale la pena mas muertos y los heridos por un parque?, mi respuesta es, pues depende…
Actualizado el 4 junio,2013.
Planeta Estambul 
Amigo, como cualquiera que quiere a Turquía estoy de acuerdo contigo al cien por cien. Estos disturbios son el resultado de años de gobierno desde la prepotencia y la arrogancia. El primer ministro ha fomentado la polarización de la sociedad turca, humillando a los que no le votan. Lo peor es que aquellos que llegaron para democratizar el país, han acabado usando en su beneficio las leyes autoritarias que estaban en vigor. El asunto de los medios de comunicación es lo más lamentable de todo. Es hora de que los países europeos dejen de reirle las gracias a este hombre y le exijan responsabilidades por sus actuaciones frentistas e irrespetuosas con su propia población.
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De la misma forma te dire José que estoy totalmente de acuerdo contigo y comparto al 100% tus palabras. Una democracia sin dialogo no es democracia.
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El primer ministro demasiado es arrogante.Solo hay sus propias verdades.
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Totalmente de acuerdo Bedii, no existe una sola verdad, existen muchas y si no aceptamos eso nos volvemos arrogantes y autoritarios y eso es el principio del fin.
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